Mi hermanito de la luna

Siempre se dijo que esta es la era de las comunicaciones y la información. Es cierto ¿qué duda cabe? pero también es falso o por lo menos, mi definición personal para esas palabras es otra. Comunicarse implica escuchar y vivimos tiempos donde la gente habla más de lo que escucha. Informar bueno ... informar es decir la verdad y en todo caso, aclarar correctamente cuando sólo damos una opinión personal.

La paradoja de este mundo moderno es que la información sobra y la información falta. Y falta, porque los medios, pequeños y grandes hablan de lo que no saben y en ese hablar por hablar cometen el peor de los pecados, lastimar a otros.

Tal vez, por eso esta entrada de Palomas de Papel y esta otra de Gem@ Blog y tantas otras que muestran solidaridad y respeto por Maite, la mamá de Julen, un niño feliz, de 3 años con autismo.

Y entonces, frente a ciertas barbaridades, Maite dice: "Es muy injusto que no solo nos encontremos y luchemos con las dificultades propias del síndrome sino también con el añadido de la ignorancia de los demás que desconociendo lo que es el autismo nos cierran puertas y nos ponen trabas."

Y entonces, frente a la ignorancia, deberíamos detenernos por un minuto y ponernos a pensar en una frase tan sencilla como esa de Iguales pero diferentes porque en realidad, justamente, lo que nos iguala, son las diferencias.

Mi hermanito de la luna